UN BLANCO FÁCIL (Dir. Jean-Paul Salomé)

La historia real de Maureen Kearney, la principal representante sindical de una potencia nuclear multinacional francesa. Se convirtió en denunciante, denunciando acuerdos de alto secreto que sacudieron el sector nuclear francés. Sola contra el mundo, luchó con uñas y dientes contra ministros del gobierno y líderes de la industria para sacar a la luz el escándalo y defender más de 50.000 puestos de trabajo. Su vida dio un vuelco cuando fue asaltada violentamente en su propia casa…

Maureen Kearney es la representante de los obreros en la empresa de energía nuclear francesa Areva. Todo transcurre con normalidad en su vida hasta que esta empieza a torcerse a raíz de que la protagonista denuncie ciertas negociaciones de Areva con China para construir centrales nucleares que podrían dejar sin trabajo a miles de obreros. Lo que empieza, grave de por sí, siendo ataques intimidatorios y amenazas, acaba con una brutal agresión sexual dentro de su propia casa que todo el mundo cuestionará para tratar de quitarle veracidad, voz y sobre todo, poder.

El director de la película, Jean-Paul Salomé, quiso demostrar a lo largo del filme que el machismo fue algo muy presente dentro de los directivos de Areva en la historia real, además de retratar lo amenazados que se sienten algunos hombres cuando es una mujer la que se encuentra en un puesto de poder. No sólo Maureen se ve afectada por estos directivos, también ocurre con Anne, la ex presidenta de la compañía, que se ve discriminada claramente por motivo de género.

Maureen Kearney es interpretada por Isabelle Huppert, acompañada de un reparto fundamental en el que Grégory Gadebois da vida al marido que apoya en todo momento a la protagonista, Marina Foïs es la antigua directora, que apoya la investigación de la conexión china, e Yvan Attal es el nuevo e irascible director que le va a poner las cosas muy difíciles a Maureen.

++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++

Deja un comentario