Houria es una joven y talentosa bailarina. Para luchar por sus sueños y conseguir algo de dinero, participa en apuestas clandestinas. Pero una noche, tras haber ganado una fortuna, es atacada. Tras este inesperado acontecimiento, su mundo cambiará para siempre.
Tras el éxito de Papicha, sueños de libertad, la cineasta Mounia Meddour y la actriz Lyna Khoudri vuelven a reunirse en Houria, relato de superación personal que acompaña a una joven bailarina que sobrevive en Argel limpiando habitaciones de hotel y que por la noche apuesta en peleas clandestinas de carneros -con nombres tan curiosos como Bin Laden, Putin o Shakira- para regalarle un coche a su mamá.
Tras una afortunada ronda de combates, Houria es asaltada por un hombre y, como resultado del ataque, se ve obligada a reinventarse como mujer, relacionándose con el entorno a través del silencio y de la expresión artística. Lo que plantea Meddour, quien además de directora es la autora del guion de Houria, es una historia de reconstrucción -física y psicológica- a través de la sororidad.
La película tiene un exceso de elementos dramáticos convulsionados uno detrás de otro, es un filme que resulta interesante en su forma de expresar los miedos y anhelos colectivos a través del temor y la esperanza individuales. El final, en este sentido, resulta muy efectivo.
****************************************************************************************************************