Esta entretenida película es el último trabajo de Louis Garrel, una sentimental película policíaca. Desenfadada, conmovedora y divertida, el filme aborda varios temas, oscilando alegremente entre la comedia sentimental y el cine de atracos.

Cuando Abel descubre que su madre, Sylvie (Anouk Grinberg), que ronda los sesenta años, está a punto de casarse con un hombre en la cárcel, entra en pánico. Respaldado por Clémence, su mejor amiga, hará todo lo posible para intentar protegerla. Pero su encuentro con Michel, su nuevo padrastro, podría ofrecer a Abel nuevas perspectivas…

La película está claramente hecha para que el gran público disfrute alejado de sus preocupaciones personales. Un guion bien construido, va enlazando secuencias adecuadamente interpretadas, para dejar satisfecho a quien desea encontrar acción, amores, humor y persecuciones. Termina siendo una película entretenida y a la vez emocionante, narrada con sencillez y gracia. En ella no hay afán de pretenciosidad, es una película honesta. Lejos de cierto cine supuestamente “intelectual”, sin olvidar la historia, con sensibilidad y humor, consigue indagar en cuestiones en cuya verdad nos reconocemos.

La construcción de los personajes también es inteligente, son creíbles, sus conflictos resultan cercanos, y la pareja Merlant-Garrel está magnífica,. A destacar muy especialmente la interpretación de Noémie Merlant, que nos muestra su don para la comedia.

Pasarán un buen rato.

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