INCREIBLE PERO CIERTO (Dir. Quentin Dupieux)

Conseguir vivienda hoy en día es una auténtica odisea; quizá por esto, Alain y Marie no dudan en comprar una casa que lo tiene todo, incluso un sótano con extrañas propiedades. Poco a poco, Marie se irá haciendo adicta a adentrarse en la planta baja de su nuevo hogar, mientras la pareja se debate entre compartir o mantener el secreto del lugar con sus nuevos vecinos.

Partiendo como base que el director francés siempre logra de sus intérpretes una naturalidad muy medida en la que no resulta complejo ver reflejados a un pariente, un amigo o incluso a uno mismo. Lo cual no solo ayuda a la espontaneidad de la comedia, que no llega a resultar forzada y surge cuando toca, sino que también llama a la universalidad del tema que trata.

Nos dice directamente con su propuesta fílmica que el tiempo es ese peligro que de una forma u otra termina dominándonos. Ineludiblemente. En un metraje que apenas llega a la hora y veinte minutos, Dupieux deja al descubierto nuestra fragilidad mental cuando intentamos alcanzar lo imposible. Y lo hace con ironía, como aquel que mira los anuncios de teletienda en los que se promete un nuevo-yo a través de métodos simples y ridículos como un coche nuevo, un pene más largo, un bisoñé o la silicona. Con todo esto, la película no me ha interesado nada.

Lo único destacable es su reparto, en él encontramos a Alain Chabat, Léa Drucker, Anaïs Demoustier y a Benoît Magimel. Este último sin duda, lo mejor de la película.

Aún sabiendo que Quentin Dupieux no es un director para todo el mundo, sus películas son especiales, muy diferentes y tiene un humor muy absurdo, quizá por eso siempre hay que darle otra oportunidad.

+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++

Deja un comentario